Leandro Romagnoli es el ídolo máximo de San Lorenzo. El de los más grandes, aquellos que vieron sus primeras gambetas en los albores del siglo XXI, y también el de los más chicos. Por eso, en su cumpleaños número 36, los juveniles que viven en la pensión del Ciclón decidieron darle un regalo al capitán.
Sí, luego de consultarlo con Enrique Polola, el director del complejo habitacional, se acercaron al entrenamiento de Primera y le obsequiaron algo muy especial: la remera/uniforme que los pibes utilizan para identificarse como habitantes de La Casona.
“Muchas gracias, chicos. De corazón”, agradeció el Pipi. Y Olé registró el momento en el que Luis Sequeira, Agustín Haugh (ambos categoría 2003), Tomás Porra y Agustín Giay (2004) le acercaron la camiseta. “La idea era darle nuestro uniforme en forma simbólica. El también fue un chico surgido del club”, le contaron a este diario. (Fuente Diario Deportivo Ole)
